Es de sobra conocida la postura que el Gobierno de España mantiene con relación a la posición común que la Unión Europea sostiene frente al régimen castrista. Al Gobierno Zapatero no parece importarle que el resto de miembros de la UE estén dispuestos a mantener lo acordado en 1996, como tampoco parecen importarle ni las peticiones que al respecto hace la oposición cubana, ni las advertencias lanzadas por los excarcelados que están en España. Zapatero prefiere cerrar filas con el régimen castrista y para ello organiza una visita oficial que el Partido Socialista celebrará en la primera semana del mes de septiembre.
Como si de una costumbre se tratara, nadie se entrevistará con la oposición en un momento en el que el castrismo no ha hecho más que incrementar la represión. El PSOE prefiere entrevistarse con el gobierno de Castro y defender su buen nombre, aunque sea en contra del testimonio de los cubanos que durante años han padecido el espanto que son las cárceles en Cuba.
Como sea, Zapatero tiene un problema: los presos cubanos que han viajado a España le piden estatuto de ciudadanos exiliados. Y mientras, nuestro Gobierno, sigue sin reconocer que en Cuba se persigue, se espía y se maltrata. Y lo peor es que algo así puede llevar al Gobierno Zapatero ante los Tribunales. ¡Qué le habrá prometido Zapatero a los Castro! Es lamentable que el Gobierno de España se esté comportando como un lobby al servicio de los Castro. Esperemos que Europa se mantenga firme y que España deba sumarse a las decisiones de la UE con respecto a Cuba.
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